NO ES FALSEDAD, ES PSICOLOGÍA

Publicado el 5 de octubre de 2025, 20:12

Seguramente te ha ocurrido esto… Estas fuera de tu círculo social y de tu entorno habitual, ya sea tu ciudad, fuera de tu pueblo o de tu trabajo incluso y te encuentras a una persona que en circunstancias normales en tu entorno habitual (ciudad, pueblo, trabajo, clase) no te saluda e incluso puede que ni te mire, pero si lo hace cuando te ve en ese lugar, fuera de estos contextos… y no lo entiendes o incluso piensas que es hipócrita o falsa…

No te preocupes es habitual, tiene una explicación y tiene que ver con la atribución defensiva y el instinto de supervivencia.

¿Nunca te ha pasado que vas a un sitio nuevo, no conoces a nadie, todo te resulta extraño… y de pronto ves una cara familiar o escuchas un acento como el tuyo, y automáticamente te relajas? Quizás no lo hayas observado pero inconscientemente sucede así y de ahí la respuesta que facilita el saludo por parte de esa persona o por qué no , de ti mism@ hacia ella, esa acción y esa sensación no es casualidad, es tu mente recordándote que lo conocido da seguridad.

Nuestro cerebro está diseñado para protegernos. Cuando salimos de nuestra “zona de confort”, se activa la alarma interna, ese leve malestar que sentimos ante lo nuevo que no es debilidad, es instinto de supervivencia.

Pero aquí viene lo curioso, si dentro de ese entorno desconocido encontramos algo familiar, algo que nuestro cerebro puede reconocer, la sensación de peligro baja, disminuye y se asocia de forma inconsciente a la tranquilidad o a la reducción de peligro.

La psicología social explica que cuando reconocemos algo, una persona, un grupo, una costumbre, nos sentimos más seguros. Es una especie de ancla emocional que nos ayuda a estabilizarnos incluso en medio del cambio y sobre todo cuando estamos fuera de nuestra zona conocida.

La psicología social nos enseña que gran parte de lo que sentimos o hacemos no es casual, sino relacional, por eso no siempre cambian las personas, a veces cambia el contexto y en un entorno desconocido, hasta una persona que pasa desapercibida en nuestra vida y que nos importa poco puede ser refugio.
La mente no busca falsedad… busca seguridad.

Añadir comentario

Comentarios

Todavía no hay comentarios